Inversión en mercado de capitales / Analogías

Aguascalientes, Febrero 08 (2022).- Estimado lector: Recientemente recibí una llamada de una persona neófita en cuanto a inversiones se refiere. Preocupada por sus resultados al invertir en banca tradicional, se percató de que su dinero se estaba haciendo cada vez más pequeño en lugar de lo opuesto como creyó que sería al momento de tomar la decisión de invertir en renta fija. Su rendimiento anual en 2021 fue de 1.50% neto, un porcentaje muy por debajo de la inflación acumulada publicada por el banco de México en el mismo periodo, que fue de un 7.36%. Casi 6% en negativo, lo que equivale a decir que por cada 1,000 pesos de invertidos a comienzos del año, finalizó con 940 solamente. No es de extrañar la preocupación de la consultante.

Comencé haciendo varias preguntas para conocer su estado actual. Edad, monto a invertir, horizonte de inversión, aversión al riesgo. Necesidad de flujos de efectivo y frecuencia de los mismos. Al final, le sugerí un método fácil y práctico: Invertir en el esquema de crowdlending o préstamo colectivo. Sus tasas de rendimiento van de un 9% y hasta un 19%. Este esquema es muy similar a lo que tradicionalmente se conoce como prestamista o usurero. Pone en contacto directo a dos personas, una que presta dinero (inversionista) y la que lo necesita. La ventaja es que las tasas de interés que se negocian son muy beneficiosas para ambas partes, puesto que están muy por debajo de la banca tradicional. Así ambas partes involucradas se ven beneficiadas al establecer un esquema directo, fácil y práctico. Si estás interesado en ello, te proporciono mi código de referido: CRD-2049532. Ingresa a yotepresto.com y regístrate en la modalidad “quiero prestar”. Fondea tu cuenta desde 200 pesos y listo, empieza a generar intereses desde el primer préstamo que fondees.

Ahora me centraré en el titular de este artículo, en la renta variable a través del mercado de capitales, mejor conocido como bolsa de valores. Es realmente apasionante y estimulante, aunque para la mayoría de las personas no les es familiar o les genera desconfianza. En México tenemos dos bolsas de valores, MMV (Bolsa Mexicana de Valores) y BIVA (Bolsa Institucional de Valores). Ahí se negocian millones de operaciones todos los días. Los intermediarios bursátiles (bancos, casas de bolsa) compran y venden acciones de miles de emisoras de lunes a viernes. Desde México es a través del SIC (Sistema Internacional de Cotizaciones) se puede invertir en otras partes del mundo. Así, no es requisitorio el abrir cuentas en el Norte de América, Europa o Asia para ser dueño de empresas multinacionales.   

Tradicionalmente, cuando hablamos de mercado de capitales nos referimos a:

ETF (Exchange Traded Fund): Es un fondo de inversión que contiene varias empresas en cartera. Sirve para diversificar y no invertir de forma directa en una sola, sino que se adquiere un porcentaje de varias a su vez. Suele ser accesible y en su mayoría ofrece el pago de dividendos a sus tenedores. Existen ETF por capitalización bursátil (Micro, pequeña, mediana y gran capitalización); por sectores como el tecnológico, de biotecnología, farmacéutico, bienes raíces; por territorios como Asia, Europa, Estados Unidos, etc. 

Acciones: Toda empresa pública negocia sus títulos en las bolsas de valores. Los pone a disposición de inversionistas privados e institucionales. Así, quien los compra se convierte en dueño de una parte de la empresa, de sus plusvalías o minusvalías, así como de sus dividendos en caso de existir.

Fondos de Inversión: Es un esquema muy similar al de los ETF, con la diferencia de que son armados por las casas de bolsa y no por los grandes creadores de ETF. No tienen costo de compra, pero sí de venta. Suelen también tener una cuota de mantenimiento. Se recomienda adquirirlos con miras de largo plazo. 

Deuda pública o privada: Los gobiernos, como las empresas, requieren financiamiento para continuar con sus obligaciones, por ello, suelen salir al mercado de valores para emitir deuda con la promesa de un pago de interés a sus adquirentes. Así, se financian de forma mas económica y salen avantes de sus necesidades temporales. Por su parte, los inversionistas recibirán los beneficios pactados por los emisores, ya sea por parcialidades o al término del tiempo pactado.

¿En qué invertir? La respuesta a esta pregunta depende de las variables mencionadas al comienzo del artículo:

Edad

Monto a invertir

Horizonte de inversión

Aversión al riesgo

En mi experiencia puedo aconsejar dividir por partes las alternativas. Se puede utilizar la regla del 25%, quedando así 1/4 en ETF, 1/4 en Acciones, 1/4 en Fondos de Inversión y 1/4 en Deuda. Para más detalle sugiero que acudas con un intermediario bursátil y le expongas tu realidad, él armará un paquete a la medida de tus necesidades.